Además de las contraventanas exteriores (Mallorquinas), es posible también la fabricación de contraventanas interiores (Fraileros), gracias a un perfil de PVC diseñado por Kömmerling.
Con este perfil que va reforzado con acero, se elabora un bastidor que se adapta por la parte interior de la hoja y sobre el que luego se ajunquilla un panel machihembrado.
Las contraventanas interiores mejoran sensiblemente las prestaciones térmicas, atenuán los ruidos y permiten un oscurecimiento total del hueco, sin la necesidad de instalar persianas enrollables.
Está disponible en color blanco y acabados madera, lo que permite imitar fielmente estos elementos que tradicionalmente se han empleado en muchas construcciones.